El término «estrés» lo empleamos en bastantes ocasiones para referirnos a experiencias que contienen cierto grado de dificultad y nos generan malestar o un grado de incomodidad no manejable. Parece que el estrés nos espera escondido en algún lugar para abatirnos cuando alguna vivencia nos sobrepasa y anula en parte nuestra capacidad de respuesta lógica o esperada.